Ayer recibimos una visita que habíamos añorado por mucho tiempo. Dos de las personas a quienes más respetamos y queremos por fin vinieron a visitar a Café Tío Conejo. Estos dos seres humanos son quizás de las personas que mejor entienden al Campo Colombiano, pero además, ellos viven vidas que filosóficamente compartimos y por qué no decirlo, que a veces envidiamos.

Alonso Correa, sociólogo y profesor universitario, un analista agudo y sobrio de la realidad del campo en Colombia, y Hernando Hincapié, creador y motor de La Pequeña Granja de Mamá Lulú, un centro de experimentación y de desarrollo filosófico en el área cafetera, como no hay otro.

Ayer vinieron a ver nuestro proyecto y si bien nos regañaron cuando consideraron que habíamos pecado por ingenuos, también nos dieron su voz de apoyo y reconocieron que nuestro proyecto es válido y valioso.

Café Tio Conejo no podría tener mejores Padrinos que a estos dos entrañables amigos de la Casa. Tal vez sin ellos no habriamos empezado a soñar en volver a nuestra tierra y en hacernos cafeteros.

Mil gracias amigos!!!